miércoles, 4 de abril de 2012

Construcción de la Seo de Manresa, la bóveda y la enjuta

Hasta ahora hemos visto los siguientes temas referentes a la construcción de la Seo de Manresa:
01. Que es la Seo de Manresa
02. Dónde está construida
03. Hacia dónde está orientada
04. Qué medidas tiene en planta
05. Construcción del ábside
06. Que es la nave de los fieles
07. La longitud de la nave
08. La construcción de la nave

09. Definiciones de arcos 
10. La construcción de los arcos
En este capítulo veremos las distintas formas de construir bóvedas y enjutas.
Si no se indica la fuente, todas las fotos y planos son de Jaume Espinalt

Se recomienda empezar la lectura del tema "Crear en Gótico" por el primer capítulo para tener una visión general.
 

En un edificio románico, la bóveda no tiene demasiada complicación, es lo que vemos cuando miramos hacia arriba. En un edificio gótico la bóveda es el elemento que sigue al eje longitudinal del edificio, mientras las enjutas son los elementos triangulares perpendiculares a este eje y como se aprecia en la foto superior de la Seu de Manresa, enmarcan los ventanales góticos y liberan los muros de peso excesivo.
La bóveda es una de las últimas partes que se construye, primero se hacen todos los bajos del edificio: columnas, capillas laterales, naves laterales y sus respectivas bóvedas, etc. hasta el alféizar de los ventanales. Después se suben columnas, nervios, claves de bóveda y torales; finalmente se cubre todo.
La bóveda y la enjuta. En el fondo los podríamos considerar una sucesión de torales o formeros pegados uno al lado del otro, teniendo en cuenta que ambos elementos van situados encima de sus respectivos arcos, la forma de dibujarlos sería la misma. Había diversas maneras de construir las bóvedas:
  • Instalando una gran cimbra que recorría en madera toda la forma que querían obtener y los albañiles iban disponiendo sobre ella todos los sillares bien ligados con mortero. Era una forma segura para los trabajadores pero lenta en ejecución, ya que se hacía imprescindible que un equipo de "encofradores" preparaba primero el terreno. De todas formas hay que tener presente que difícilmente podían llegar a cubrir el 100% de las bóvedas o enjutas debido a la inmensa cantidad de madera que habrían necesitado.
  • Construir la bóveda al vuelo. Era una manera rápida de construir la bóveda pero extraordinariamente peligrosa para los trabajadores. Consistía en atar a un palo o a una viga plana y paralela a las hiladas, un buen puñado de cuerdas situadas a un palmo una de la otra, en el extremo opuesto se ataba un peso en cada cuerda. Empezaban apretando con mortero un sillar haciendo coincidir exactamente los respectivos lechos, mientras lo sostenían con las manos para que no cayera al vacío, le hacían pasar una de esas cuerdas por encima para que lo trabase con el propio peso, continuaban con otro sillar y otra cuerda hasta que habían terminado la hilada; empezaban una nueva hilada con el mismo procedimiento: sillar, mortero y cuerda. Como los sillares ya llevaban el ángulo predeterminado en la cantera, el desvío que podían obtener no era demasiado grande, el peligro consistía en que si no había suficiente mortero o no había cuajado bastante bien, podía caer la bóveda con los trabajadores. Estas bóvedas normalmente las construían en las capillas laterales, de una altura más razonable, no la bóveda principal ni las enjutas de la nave. En el plano superior (parte de mi aportación al Plan Director de la Seo de Manresa) se puede ver en la parte derecha como el arco es más elevado en la zona central y en la parte izquierda sube más en el vértice. Las líneas en zigzag de la izquierda corresponden a un "descosido" de los sillares que no tiene que ver con este tema.
El dibujo de John Fitchen extraído de un libro de mi propiedad "The Construction of Gothic Cathedrals" del año1961 nos muestra en diferentes vistas el modelo explicado.
  • Había un tercer modo de construir bóvedas. Era construyendo la cimbra con tierra. Por ejemplo: una cripta, una galería bajo claustro, etc. Si había que hacer una de estas construcciones, cuando el edificio ya estaba terminado o casi, era mucho más fácil sacar la tierra necesaria para hacer el punto redondo de la bóveda y disponer los sillares sobre la tierra, que vaciar todo y construir una cimbra de madera, después una vez la bóveda estaba construida ya podían retirar la tierra que había hecho las funciones de cimbra. No había ningún peligro de accidente ya que el personal siempre estaba en "tierra". (ver fotografía más abajo)
Normalmente la gente ve las bóvedas góticas desde el plano de la iglesia, difícilmente tendrán nunca la oportunidad de verlas mas de cerca. La grandeza de este trabajo es que que ofrezco la posibilidad de ver a todo el mundo el interior de estos elementos que de otra manera, la gente nunca llegarían a ver, oler o tocar. 
El siguiente dibujo Teoremas Históricos-115 (2) nos muestra en sección el interior de una bóveda, en la parte inferior hay mucho peso, está el "Tas de Charge", desde este punto hasta el plano de la azotea pueden haber unos 5 ó 6 metros de altura y tiene una forma de embudo muy pronunciada, es una trampa mortal si alguien cae dentro y no hay nadie cerca con una cuerda. Si observamos la fotografía superior con la traducción catalán-castellano nos podemos hacer una idea de la magnitud del riesgo.
El dibujo de la Seo 12B (lado derecho) muestra como el arco toral forma parte de toda la estructura o musculatura del edificio, es un muro que llega hasta los cimientos. No es sólo un arco donde se sostienen los sillares como es el caso de los nervios diagonales.
Las siguientes fotografías nos mostrarán diferentes visiones de su interior. 
A la izquierda tenemos el muro vertical del arco toral frente al pozo (a medio limpiar de escombros) con el "Tas de Charge" al fondo y a la derecha la enjuta.
A la izquierda tenemos el muro del arco toral, en frente la curvatura de la bóveda y a la derecha la curvatura de la enjuta. Se han clavado unas barritas de forjado en los sillares de la bóveda que ayudan a salir del pozo. La fotografía está tomada a unos 4 metros de la superficie. Esta fotografía y la anterior corresponden a un mismo arco toral y a las dos enjutas adyacentes, una a cada lado. (Véase foto catalán-castellano para interpretarlo mejor)
En esta fotografía podemos apreciar a la derecha de la imagen (zona oscura) el efecto del fuego sobre los sillares. Es decir, el fuego deshizo todo el mortero y atravesó la bóveda, la imagen corresponde a una de las enjutas del ábside, a los pies habría un nervio y más a la derecha otra enjuta en simetría con ésta. No hay torales. Me impresionó el olor a quemado que hacía el interior de la bóveda, a pesar de haber pasado más de 60 años desde el ultimo incendio producido en una guerra.
Interior de una bóveda poligonal: en el centro la clave de bóveda, los radios corresponden a las aristas de las enjutas, cada enjuta tiene su propio ventanal.
Enjutas góticas de la Seu de ManresaEl aprovechamiento de tierra o arena no es un invento medieval. En Egipto hacían rampas con arena para mover a planos superiores grandes bloques de piedra que manualmente o con poleas no lo habrían podido hacer nunca. En las catedrales góticas también se ayudaban de inmensas cantidades de tierra para mover piedras o fijar andamios a unas alturas considerables. El problema de la tierra es que cuando has terminado la obra la tienes que sacar y se llevará a un lugar u otro. Para solucionar este problema tuvieron la siguiente idea. A medida que aumentaban el volumen de tierra, iban esparciendo monedas; cuando la tierra ya se podía retirar, invitaban a todos a ir con carros o carretillas y llevarse toda la tierra que quisieran, después la pasaban por un tamiz y todas lasmonedas que recuperaban las podían quedar. Lo que no estaba permitido era ir a la obra sólo a buscar monedas con un cedazo.
Bóveda construida aprovechando la tierra como cimbra -tercer modo de construir bóvedas-, observese que las losas están dispuestas en plano, no en vertical (forma de hoja de libro).
Galería sepulcral.
Bóveda construida con una pequeña armadura de madera que se ancla en las impostas laterales, tiene poca altura y poca luz, casi se podría construir sin andamio, la armadura de madera se va cambiando de lugar a medida que se construye la bóveda. Por los agujeros superiores bajaban los difuntos.
Falsa bóveda "románica" construida con hormigón armado.
Hemos comentado que las bóvedas se construían depositando los sillares sobre las cimbras de madera, en el románico la técnica variaba un poco:
  • Sobre la cimbra esparcían un entretejido de cañás aplastadas de modo que llegaran a cubrir toda la superficie. 
  • Sobre las cañas esparcían el mortero y a continuación depositaban los sillares y más mortero para ligarlo todo.
  • Cuando el mortero se había secado desmontaban la cimbra, arrancaban las cañas y el mortero restante lo podían pintar o dejarlo blanco. No olvidemos que las iglesias eran muy oscuras y con esta actuación aportaban luz a la nave.
  • Con los años ha caído este mortero o lo han hecho caer en restauraciones y hoy día vemos unas bóvedas muy bien iluminadas que no responden al espíritu románico. 
Bóveda románica con restos del encañizado original.
El nuevo atrio de la Seo de Manresa
Hay una manera moderna de construir "bóvedas góticas" es el uso del Pladur. Una bóveda auténtica se construye desde arriba. En el caso de esta restauración, la bóveda no había sido jamás construida, pero si que construyeron un piso superior en el lugar donde le hubiera correspondido en el caso de haberse construido la bóveda. La única manera de poder construir la bóveda de una forma convencional era: deshacer todo el piso superior para tener espacio para poder trabajar, construir la cimbra, nervios, torales, claves de bóveda, la bóveda y finalmente volver a construir el piso. Habría costado mucho dinero y la solución empleada con Pladur, dará un acabado digno. Que a un Monumento Nacional le apliquen estas soluciones, no es esperanzador para las nuevas hornadas de arquitectos restauradores.
La siguiente secuencia fotográfica nos permite ver la evolución del proceso; en primer lugar la bóveda a medio construir, la segunda fotografía nos muestra la bóveda ya pintada y acabada y finalmente el dibujo en 3D nos permite ver las diferencias entre una bóveda ojival y el invento moderno. Hemos visto en otros capítulos como los arquitectos medievales intersectaban cañones del mismo estilo controlando luz y altura. Nunca se habrían atrevido a intersectar cañones de diferentes estilos como en este caso, donde se cruzan un cañón ojival con un cañón elíptico (figura creada al aplicar un corte en diagonal a un cono de revolución).




Existen diferentes razones para ello, la más elemental es que no hubieran sabido construir unas cimbras que tuvieran una forma tan complicada en las aristas de intersección, visualmente llama la atención y esto los obispos de la época no lo hubieran permitido, finalmente la elipse y el cono no son precisamente figuras góticas muy utilizadas. 
Compruébese como las líneas diagonales nos indican por donde deberían pasar las aristas en una intersección ojival clásica. 
Se puede argumentar que estamos en el siglo XXI y que las herramientas informáticas nos permiten visualizar en pantalla el resultado final y confeccionar plantillas y todo lo que nos convenga, pero para los puristas del gótico, es una auténtica aberración. La obra no es una buena restauración y dice muy poco en favor del arquitecto responsable. 

Y finalmente el colmo de los despropósitos, "pegarle" una clave a una bóveda de arista, el arquitecto hace años que debía jubilarse y no lo hizo. Hoy ni siquiera escucha, ahora hay el riesgo de que la gente le recuerde por las pocas soluciones irreflexivas de los últimos años y se olvide de las grandes actuaciones que efectuó a lo largo de su carrera. Una lástima.